Bendita lluvia. En su justa media, por supuesto. Pero hoy me ha cogido con ganas. Me he puesto mis botas de agua, que me llegan casi hasta la rodilla y están forradas de un pelito blanco calentito divino, y cuando iba de camino al prepa ha ocurrido: ¡he visto charcos! No me he podido contener, he pisado toooodos con los que me he cruzado. Ha sido una terapia estupenda: cuando he entrado para cantar parecía que me había metido algo del subidón que llevaba jajaja.
Es que a veces nos olvidamos de lo bien que nos lo pasábamos de peques cuando hacíamos trastadas. Tanto artículo, tanta ley y al final hasta por inercia cumplimos con las normas sociales. No puede ser eso. Lo primero es uno mismo.
Y si digo la verdad hoy me he reprimido porque estaba en medio de la calle y ya bastante me estaba mirando la gente... A la próxima salto encima de los charcos directamente. Pleno minuto 3:13 del video. Que me miren mal las señoras. Que se manche lo que haga falta. A tomar por culo todo. ¡Que me quiten lo bailao!
¡Un abrazo compañer@s!
oh yeah!!! sensaciones placenteras!!! adoro esa peli por cierto (sobre todo la canción de good morning, para un domingo bajonero te la recomiendo). A mi lo que más ilusión me hace cuando salgo a correr y giro en concreto una esquina en la que es improbable que pase nadie, es hacer el avión jajaja, estirar los brazos y hacer que planeo. Reivindicamos la infancia como método de escape ;)
ResponderEliminarOye lo de hacer la avioneta me lo apunto!! jajaja Y la canción de good morning es genial! Es mi canción favorita para dar por culo a los dormilones las mañanas de los sábados jajaja Un abrazo guapa!
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