He empezado a opositar... ¡SOCORRO! - Algunos consejos

   Me consta que estamos en la época predilecta de nacimiento de opositores. Qué tierno... porque uno nace opositor como nace niño: con alegría y ganas, pero muy perdido. O al menos así empecé yo. Precisamente por eso me ha hecho tanta ilusión que este mes atrás un par de ellos se me hayan acercado de una forma u otra para pedirme algún consejillo sobre cómo ubicarse o meter mano a este "embolao" en el que se han metido. 

   Y me he dado cuenta de que no me hubiera venido mal a mí tampoco un poco de información extra a la que ya me dieron en su día. Así que, ya puestos, he decidido dedicar una entrada a esos bebé-opositores (y que conste que lo digo con todo el cariño del mundo) para intentar ayudar un poco a aquellos que pasen por este rincón, aunque sea someramente y de forma un tanto simplista. 

- FILOSOFÍA -

   Si acabas de empezar con la opo, ante todo te diría que no te agobies. El principio yo lo veo como el despegue de los aviones, que se tiene que ir cogiendo poco a poco velocidad, sorteando algunas curvas y, soportando la presión en los oídos hasta que se coge altura. En definitiva, que no siempre va como la seda. Necesitas un tiempo para aclimatarte a la oposición y entrar en rutina (o "modo travesía"). Por eso, te diría que te tomaras el primer mes con esa filosofía, de "experimentación" en cuanto a estudio se refiere.

   Por otra parte, la meta de conseguir la ansiada plaza hay que cuidarla con una actitud positiva. Me explico, ese sueño que tenemos cuando empezamos a opositar de aprobar algún día y llegar a ser juez/fiscal/secretario/inspector/funcionario debemos alimentarlo y no sólo con un estudio pertinaz, sino también con una perspectiva optimista. Personalmente intento visualizar el momento en el que apruebo la oposición, cómo actuaría, cómo lo celebraría y, por contra, destierro todo pensamiento claudicante que me llega. Además, (y aunque suene muy opofriki) a la oposición hay que darle cariño, no verla como una enemiga y una traba a tu felicidad, sino como una compañera de camino con la que se puede aprender mucho.

- ORGANIZACIÓN -

   En la oposición es importantísima la organización. Incluso a nivel psicológico creo que ayuda a ver que conseguir la plaza es factible. En dicha organización es clave el preparador, pues él te va dirigir dada su riquísima experiencia. Ahora bien, esa guía debe ser consensuada, y tus planteamientos pueden ser perfectamente válidos. Este planning macro es el que en gran medida te puede motivar en el día a día, ya que de otro modo puedes correr el peligro de "perderte" en los 322 temas (o los que sean en tu oposición). Así normalmente se marcan unos objetivos, en ocasiones enlazados con los bloques de temas, que abarcan unos meses concretos. Añado que como muy sabiamente apunta Luchandoporunaplaza, hay dos tipos de plannings: los que son a largo plazo (que incluyen todo el recorrido de la oposición y el total de los temas) y los del corto plazo, ya bien sean mensuales, semanales o incluso únicamente de cara al cante. Es importante, como ella apunta, intentar centrarse en ese corto plazo y cumplir objetivos dentro de él, sin darle muchas vueltas a la cabeza en cuanto al "planning-macro" (que bien puede dejar sin respiración). Así que a por ese cante próximo y a olvidarse de lo demás, que ya irá llegando.

   Dentro de esta organización un elemento clave para mí es la agenda. Aunque al principio de la oposición no contaba con una, ahora mismo se me hace imprescindible. No podría pasar sin ella, porque soy un desastre. Además me sirve para apuntar los temas que llevo cada día y las mil millones de cosas que tengo pendientes para el día libre. 

- CONCENTRACIÓN -

• Aleja el móvil cuando estés en el tajo.
• Hazte con unos tapones o unos cascos insonorizadores.
• Ponte metas cortas que te ayuden a no levantar la vista del papel (por ejemplo, cuando acabe el tema me meto en el blog de OV =P).
• Lo recomendable es tener una mesa de estudio ordenada, puesto que, quieras que no, si el sitio de estudio es agradable éste se hace menos "tormentoso". Por esa regla de tres cuida también la silla, su altura respecto a la mesa, el color de las paredes o incluso los olores (estoy a punto de adquirir una plantita aromática para el opozulo, ¡os contaré!).
• Para una buena concentración y un nivel adecuado de rendimiento en el estudio es fundamental atender bien todas las necesidades, y estoy pensando en el descanso nocturno, una alimentación adecuada y una suficiente hidratación (lo de beber bastante agua -¡o infusiones!- creo que es importante). Y por supuesto deporte, ¡fundamental!
• Si aun con las condiciones favorables sois de "naturaleza dispersa" como una servidora, podéis optar por un complejo vitamínico, aunque comer sano es mucho más importante, ¡dónde va a parar!
• También de esa concentración puede depender el que decidas estudiar en casa o en la biblioteca. Hay quien se distrae más en su casa con el ordenador cerquita, y quien va a la biblioteca y parece un relaciones públicas...
• Para ayudar a la concentración yo también suelo hacer dos cosas: A) descansos cada poco tiempo, sobre todo si el tema que estoy estudiando es densito; y B) acometer el estudio de la parte más fea del tema o del artículo más truculento al inicio del estudio del día o tras la pausa del almuerzo, para estar "más fresquita".

- TÉCNICAS DE ESTUDIO -

• AVISO: Aquí hay para gustos los colores y también dependen del tipo de examen, es decir, unas no son mejor que otras, simplemente unas les van mejor a un tipo de personas que a otras. Yo os pongo algunas con las que me ha ido bien, aunque puede que tengáis ideas mejores, ¡son bienvenidas!
• Quizás te convenga hacer un plan del día con el tiempo que quieres dedicar al estudio y las metas que quieres cumplir esa jornada. Consiste en desmenuzar esas metas en los temas concretos que te quieres mirar y el tiempo a dedicar a cada uno. Yo contaría con una media hora extra al final para acabar lo que no te haya dado tiempo antes.
• También puedes cronometrarte el tiempo que quieres dedicar a cada tema y así ves si te estás alargando más de la cuenta con alguno. Esto a mí me sirve de presión añadida al ver que me estoy retrasando y no me va dar tiempo a ver todo lo previsto y, como consecuencia, empiezo a rendir mejor.
• Personalmente me hago los temas sobre la base del manual, no estudio directamente de éste, pero la mayoría de la gente sí que lo hace. Obviamente hacer los temas lleva un tiempo y es un "lastre" al comienzo, con lo que tiene su parte buena y sus desventajas. Si decides no hacerte tus temas, es importante que en todo caso sí contrastes con la ley porque los manuales tienen fallos (pienso en Carperi y la falta de literalidad de algunos artículos o el número equivocado de algunas leyes). Te recomendaría que si optas por estudiar directamente el manual te hagas un esquema del tema (quizás una carilla con letra pequeña) y lo guardes. Llegará un día en que sólo tengas que acudir al esquema para repasarlo y cuando lo cantes en el Supremo verás el esquema en la cabeza.
• Respecto a cómo abordar el estudio de un tema, creo que lo mejor es mirárselo completo por encima antes de entrar al estudio pormenorizado de los párrafos. Yo optaría por subrayarlo rápido, resaltando palabras claves. Esto ayuda a no quedarse después en blanco. También es verdad que si te haces los temas propios, este paso te sobraría. Después pasa al tema de la literalidad, pero sólo de los artículos. En cuanto a doctrina, jurisprudencia o todo lo demás que no es la ley estricta limítate a dar la idea de una forma u otra sin tener que "perder tiempo" en saberte hasta la última coma (después de muchas vueltas igualmente te lo sabrás de memoria...).
• Otra cosa que yo hago es, antes de repasar un tema que me he estudiado el día anterior, intentar hacer un esquema rápido para ver qué se me escapa e incidir más en eso. Y, por supuesto, volver a machacar la literalidad en los artículos que falle.
• En general, respecto a un tema nuevo, intento: Día1: Hacer el tema; Día2: Estudiarlo a fondo una primera vez; Día3: Estudiarlo una segunda vez al día siguiente, Día4: El día mismo de la clase hacer un mini esquema para ver qué recuerdo; Día5: Lectura rápida incidiendo en lo que haya quedado más flojo. Si sólo tengo tres días de estudio para la siguiente clase fusiono los pasos de los días 3, 4 y 5, aunque espaciándolo a lo largo del día. Si el tema es de repaso, parto desde el segundo o tercer paso, y si es un tema ya muy machacado sólo lo estudio-repaso una vez sin más.
• Para el estudio de los artículos literales uso la (llamémosla) "técnica del añadido", que supongo es la de todo el mundo. Repito mentalmente las primeras palabras del artículo, a las que voy añadiendo las siguientes según me vaya quedando con las anteriores. Es decir, si no paso de aprenderme la segunda línea del artículo no sigo con la tercera, si no que persevero en la segunda hasta que la domino y después ya voy avanzando.
• Lo importante es no quedarse en blanco. Para eso me ayudo de: A) Los colores (pintorreo mucho los temas para individualizarlos y que se me venga a la mente directamente su contenido); B) Hay que saber explicar el artículo por si falla la literalidad, asegurarse de conocer bien el contenido (puede parecer una tontería pero me ha pasado alguna que otra vez...); C) También para evitar olvidarte de un artículo estudia el doble de bien su comienzo porque (quizás no en la primera vuelta pero más adelante sí) con saber el principio del artículo te saldrá todo de corrido, mientras que si te atoras con el comienzo es mas difícil reconducir la situación.
• Si sabes que a la mañana siguiente te tienes que estudiar un tema de los de "pégame un tiro y acabamos antes...", a mí me va bien leérmelo rápido la noche anterior. Parece que después no se hace tan fatigoso.
• Para facilitar el estudio de enumeraciones te recomiendo: recordar muy bien una palabra característica de cada apartado a memorizar, usar reglas mnemotécnicas, visualizar la hoja por ejemplo rodeando palabras claves, escribir, cantarlo en voz alta... 
• En general si estudio en voz alta me suele cundir más, aunque también me cansa mucho.
• Cantar, cantar y cantar. Lo suyo es cantar antes del preparador todos los temas que se llevan al menos una vez.
• Tras el cante, lo ideal es repasar el tema para afianzar lo que haya quedado más flojo de cara a la próxima vuelta. Yo esto lo hago especialmente si ha sido un mal cante, dedicándole un ratillo la mañana siguiente a la clase.
• Una opción interesante que comenta una compañera es establecerse un tiempo máximo para cada página y cronometrarlo, de forma que cuando se llega al tope se pasa de página sí o sí. ¡Está claro que si no se pone una las pilas así no las pone de ninguna forma!

   Espero que alguno de estos consejos pueda serviros, aunque no os los toméis tampoco al pie de la letra que, como digo, pueden ser buenos para uno y malos para otra persona. ¡Ya me vais contando cómo os va!

   Si se os ocurren otros consejos, ¡no dudéis en decírmelos y los añado!

   A mis no tan "opojóvenes" y veteranos: hay que ver lo bien que nos sabemos la teoría, ¿eh? A ver si la aplicamos al 100%. Yo hay un par de cosillas ahí que sé que no hago como debiera...

Un abrazo compañerxs.